PETER MURPHY EN CHILE
12 DE SEPTIEMBRE 2014 | CLUB BLONDIE
Foto: Álvaro Manriquez
A poco más de un año de su última visita, el Padrino del Rock Gótico regresaba a Chile. Recordemos que el 2013 Peter Murphy giró conmemorando el aniversario nº 35 de la formación de BAUHAUS, su show llenó de oscura nostalgia un Caupolicán rendido a sus pies, en aquella oportunidad, por las pantallas nos adelantó lo que sería LION su nueva placa solista, álbum que a final de cuentas, lo trajo de vuelta a nuestro país. Con varios problemas de por medio, como el cambio de recinto y fecha de presentación, el señor de lo oscuro por fin concretó su cuarto show en Chile. El Club Blondie, ícono de encuentros góticos donde la música del británico ha hecho bailar a varias generaciones en sus pistas, se aprestaba para recibir a un séquito no menor de los más fieles seguidores.
Con un retraso de media hora, la música envasada se silencia y Murphy junto a su banda sube al escenario para desplegar un show íntimo y lleno de esas atmósferas delicadas y oscuras que han caracterizado su carrera. Con “Hung Up”, primer single de LION (2014) da la partida en medio de la ovación del público devoto. Si la última visita del británico estuvo cargada a la nostalgia, esta vez no da concesiones y elige un repertorio donde sus más recientes obras fueron protagonistas. Peter Murphy demuestra ser un artista que mantiene su vigencia a través de los años, no sólo por un par de clásicos, sino que a sus 57 años y más de 35 de carrera artística, su voz, templanza y creatividad siguen intactas, aunque en esta ocasión se vio mucho más estático en el escenario a lo acostumbrado. Cinco cortes de LION e igual cantidad de cortes de Ninth (2010) fueron parte de un repertorio de 17 canciones, donde la única revisión a su etapa BAUHAUS fueron con “Silent Edges” y la celebrada “She’s in Parties” con melódica en mano incluida.
El momento más alto de la jornada llegó con la incombustible “A Strange Kind of Love” y luego del encore con la coreada “Cuts You Up”, quizás sus singles más populares en solitario.
El ambiente se fue dando de manera distinta a sus anteriores presentaciones, el público fue menos efusivo, acusando al parecer poco conocimiento de lo nuevo del músico, muchos desatendiendo por largos momentos lo que ocurría en el escenario. Algo que a Peter Murphy al parecer no le preocupa, y eso quedó claramente reflejado en su setlist. Su última placa ha sido muy bien recibida por la crítica especializada, y los cortes funcionan a la perfección en vivo, sonando incluso mucho más potentes y crudos, a pesar del uso de pistas con toques electrónicos que ayudan a dar profundidad y enriquece las texturas sonoras.
Para los que fueron en busca de recuerdos y revisión de clásicos, puede haber sido en parte frustrante, pero debemos entender a Murphy como un músico que no vive de los recuerdos, y eso tiene un valor por el que pocos actualmente se pueden jactar. El es un músico que se proyecta desde el presente, no cabe duda, además de ser un referente histórico cuando de sonidos oscuros se trata. La elegancia, sencillez y talento de uno de los músicos más influyentes en las últimas tres décadas no necesita de fórmulas repetitivas y en este regreso a Chile lo confirmó con creces. La oscura estampa del inglés no da marcha atrás.
Review: Freddy Veliz
Fotos: Álvaro Manriquez
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