El 2026 comienza con una cita marcada en rojo para los fans del metal. A solo horas de cambiar el calendario, uno de los primeros grandes conciertos del año será el regreso de Avenged Sevenfold a Chile, en una fecha largamente esperada tras su reprogramación. La decepción inicial ya quedó atrás: hoy la nueva fecha está encima y la expectativa vuelve a encenderse.
Avenged Sevenfold se formó en Huntington Beach, California, en 1999, iniciando su camino dentro del metalcore antes de evolucionar hacia un sonido propio que dialoga con el hard rock y el heavy metal clásico. Su álbum debut, Sounding the Seventh Trumpet (2001), fue grabado cuando sus integrantes aún estaban en la secundaria, marcando el punto de partida de una trayectoria que, con el tiempo, se volvería tan diversa como influyente.
Desde esos primeros años ya se percibía algo distinto. Sus canciones incluían solos extensos, claras influencias del heavy metal tradicional y una narrativa más épica que callejera, elementos que anticipaban una futura ruptura con los márgenes estrictos del metalcore. Esa búsqueda constante terminó por definir una discografía volátil, inquieta y en permanente transformación.
Liderados por M. Shadows, junto a Zacky Vengeance y Synyster Gates (apodos que conservan desde su adolescencia), Avenged Sevenfold ha sabido refrescar su propuesta sin perder identidad. Riffs poderosos, melodías reconocibles y una ejecución sólida han sido parte de una fórmula que toma referencias evidentes de bandas como Judas Priest y la escuela de Ozzy Osbourne, pero siempre filtradas por una voz propia.
En Chile, esa identidad ha encontrado una fanaticada fiel, que no les ha perdido el rastro pese a la larga ausencia desde su última visita en 2014. Su regreso, por lo mismo, tiene un peso especial dentro del circuito local.
El punto de inflexión más evidente llegó con The Stage (2016), un álbum conceptual donde Avenged Sevenfold abrazó el metal progresivo, la ciencia ficción y la reflexión existencial. Fue una declaración clara de intenciones: la banda no estaba interesada en vivir únicamente de sus hits ni en repetir fórmulas que ya habían probado su efectividad. Esa decisión se profundizó siete años después con Life Is But a Dream… (2023), un trabajo experimental, arriesgado y abiertamente divisivo, que incorporó elementos de jazz, música contemporánea y estructuras poco convencionales.
En vez de seguir la corriente o repetir fórmulas seguras, Avenged Sevenfold optó por tensionar los límites y desafiar a su propia audiencia, sosteniendo una apuesta firme por el riesgo creativo. Una postura que resulta aún más significativa si se considera que esta evolución ocurrió después del éxito masivo de Hail to the King y tras una de las pérdidas más duras de su historia: la muerte de su baterista fundacional, The Rev, cuyo fallecimiento cumplió recientemente 16 años. Lejos de estancarse, la banda decidió avanzar, redefiniendo su identidad sin borrar su pasado.
En la actualidad, Avenged Sevenfold se mueve en una posición difícil de encasillar dentro del mapa del rock y el metal. No responde por completo a una sola etiqueta (ni extremo, ni clásico ni progresivo), pero logra transitar entre todas ellas con naturalidad y carácter propio. A lo largo de más de dos décadas ha encabezado escenarios, marcado a nuevas audiencias y construido una comunidad fiel, mientras su música avanzaba sin romper el hilo que la conecta con su identidad original.
Ese recorrido es el que sostiene su peso dentro de la escena actual. Más allá de rankings o cifras de ventas, Avenged Sevenfold ha demostrado que una banda nacida en el metalcore podía reinventarse, resistir los golpes más duros de su historia y consolidarse como una pieza clave del hard rock moderno sin diluir su esencia en el camino.
En ese contexto, su regreso a Chile adquiere un significado especial. Tras la postergación de su show originalmente programado para septiembre debido a problemas de salud de M. Shadows, la banda vuelve al país el 24 de enero de 2026, esta vez en el Estadio Bicentenario de La Florida, saldando una espera que no hizo más que aumentar la expectativa entre sus seguidores.
La cita se completa con un ingrediente mayor: la participación de Mr. Bungle, la histórica banda liderada por Mike Patton, que en su etapa actual rinde tributo al thrash metal con una formación de alto calibre. Una alianza que proyecta esta fecha como uno de los hitos musicales más potentes del inicio de 2026 y confirma que ver a Avenged Sevenfold en vivo hoy es, más que un concierto, presenciar una historia que sigue escribiéndose.


















