[Live Review] A-ha en Chile: Un reencuentro con los años ochenta

Después de dos años, a causa de la pandemia, A-ha logró aterrizar en el Movistar Arena, para presentar y celebrar los 35 años -tardíos- de su debut, “Hunting High And Low”, uno de sus grandes éxitos.

Con el sitio casi lleno, la agrupación noruega, conformada por los integrantes originales, el cantante Morten Harket, el tecladista Magne Furuholmenel y el guitarrista Pål Waaktaar-Savoy, acompañados por Karl Oluf Wennerberg, baterista junto al bajista Even Ormestad, se unieron para crear una línea del tiempo y llevar a sus fanáticos hacia los años ochenta, demostrándolo en poco menos de hora y media de show.

A las nueve, puntual, inició su espectáculo, con un juego de luces junto a unos sintetizadores que, poco a poco, aparecían para dar pie a la velada. En la primera parte el ambiente fue tomando forma, ajustando su sonido para lograr conectarse con su audiencia y así sacar la energía que querían transmitir. El synthpop fue el protagonista del primer tramo, con los temas, ‘The Blue Sky’, ‘Living a Boy’s Adventure Tale’ y ‘And You Tell Me’ y ‘Love Is Reason’ conformaron un arranque tranquilo.

La situación musical evoluciona poco a poco mediante, ‘I Dream Myself Alive’ y ‘Here I Stand and Face the Rain’, donde el público se levantaba, hasta que aparecieron los temas estrella del mítico disco en celebración ‘Hunting High and Low’, ‘The Sun Always Shines on T.V’ y, por supuesto, ‘Take on Me’, aquí los espectadores se animó, cantó y bailó al son de los clásicos mundiales.

Al terminar los temas, se realizó un intervalo de menos de cinco minutos, tras aquello, se dio pie a la segunda parte con ‘Sycamore Leaves’, tema que produjo un cambio radical en la presentación, las guitarras, riffs distorsionados junto a los teclados.

El maestro de ceremonia, Magne Furuholme, habló con su público, lo clásico, diciendo que, a pesar de todo, lograron concretar la gira y hacer una buena presentación.

De un momento a otro, pasaron de los ochenta al presente, la única excepción, ya que, dieron a conocer parte de su próxima producción, se trató de dos baladas, ‘Forest For the Trees’ y ‘You Have What it Takes’, estrenos novedosos y diferentes a lo ya conocido de la agrupación.

Para el cierre del concierto, A-ha optó por continuar dentro de los años 80’ al presentar canciones de sus álbumes, “Scoundrel Days” de 1986, “Stay on These Roads”, de 1988 y “East of the Sun, West of the Moon” de 1990. No cabe duda que fue una buena selección, en los últimos tres temas, el lugar se volvió una fiesta, como si estuviéramos en el pasado, llenó de coros, alegría y efervescencia, con los hits esperados para la noche,  ‘Scoundrel Days’, la bailable ‘I’ve Been Losing You” y ‘The Living Daylights’, el broche de oro que cerraba la jornada.

A-ha cumplió con lo que el público deseaba, escuchar ese anhelado sonido, bailable y coreable. La banda nos regaló una noche de nostalgia y reencuentro con ciertos años dorados que viven en nuestra memoria. 

Fotos por Andie Borie