En la vasta y férrea escena del metal, dominada tradicionalmente por hombres y marcada por una estética oscura y agresiva, Babymetal irrumpió con un enfoque radicalmente distinto. Conformado por Su-metal (Suzuka Nakamoto), Moametal (Moa Kikuchi) y, hasta 2018, Yuimetal (Yui Mizuno), este trío japonés desafió las reglas del género con su innovador estilo Kawaii Metal, fusionando la dulzura y ternura del J-pop con los sonidos pesados y contundentes del metal extremo. Contra todo pronóstico, lograron no solo integrarse en una escena conservadora, sino también ganar el respeto de las leyendas del género.
Babymetal se formó en 2010 como una subunidad del grupo idol Sakura Gakuin. La importancia de las japonesas recae que en lugar de adaptar su imagen para encajar en los estándares del metal, las jóvenes integrantes eligieron mantener su estética kawaii, con vestuarios inspirados en uniformes colegiales y coreografías coloridas, mientras interpretaban canciones cargadas de riffs pesados, baterías aceleradas y guturales. Esta combinación inusual de ternura y brutalidad resultó en algo completamente nuevo: un estilo capaz de derrumbar los prejuicios de los metaleros más puristas y de atraer tanto a seguidores del pop como del metal.
Lo que hace que Babymetal sea aún más relevante es que su éxito no solo radica en su incursión en una escena dominada mayoritariamente por hombres, sino en la forma en que se apropiaron del metal sin renunciar a su identidad kawaii. Mientras muchos artistas femeninos en el metal adoptan una estética más agresiva para ser tomados en serio, Babymetal optó por mostrar que la dulzura también puede ser poderosa.
Sobre el escenario, estas jóvenes alternan entre movimientos delicados y energéticos headbangs, demostrando que la ternura no es incompatible con la intensidad musical. La mezcla de géneros que presentan no es un truco publicitario, sino una forma legítima de explorar nuevas posibilidades dentro de la música pesada.
En 2018, la salida de Yuimetal representó uno de los desafíos más grandes para Babymetal. Sin embargo, lejos de desmoronarse, el grupo se reinventó como dúo, explorando nuevos sonidos y manteniéndose fiel a su identidad kawaii-metalera. Su álbum más reciente, The Other One, refleja una evolución hacia un sonido más oscuro y maduro, sin perder la esencia que las hizo únicas. Babymetal no solo ha revolucionado el metal al fusionarlo con el pop japonés, sino que ha abierto nuevas puertas a otras propuestas alternativas dentro del género. Su éxito demuestra que el metal, un estilo a menudo encasillado en la oscuridad y la agresividad, también puede ser diverso, creativo y lúdico.
Pese a las críticas iniciales por parte de sectores más conservadores de la comunidad metalera, Babymetal logró convertir el escepticismo en admiración. Slipknot, Metallica y Judas Priest se han declarado fanáticos del grupo, reconociendo su creatividad y autenticidad. Rob Halford, de Judas Priest, incluso compartió escenario con ellas en una presentación icónica que marcó la validación definitiva de Babymetal dentro del metal. Otro momento clave en su carrera fue su colaboración con Bring Me the Horizon (BMTH), una banda emblema del metalcore. Esta alianza no solo consolidó la presencia de Babymetal en la escena internacional, sino que demostró su capacidad para trabajar con los nombres más relevantes del género contemporáneo.
En un mundo donde las mujeres deben luchar constantemente por encontrar su espacio, Babymetal ha demostrado que no es necesario conformarse con los estereotipos para triunfar. Con cada disco y cada presentación, estas jóvenes han dejado claro que la ternura y el metal no son opuestos, sino dos fuerzas que, unidas, pueden redefinir el sonido y la estética de un género entero.
Babymetal es la prueba viviente de que la música no conoce límites ni géneros preestablecidos. Con cada actuación y colaboración, siguen ampliando los horizontes del metal, desafiando lo convencional y demostrando que el futuro del metal puede ser tan pesado como tierno. Su legado no solo radica en su éxito musical, sino también en el mensaje de empoderamiento que llevan consigo: ser diferente es una virtud, y lo que no encaja en los moldes establecidos tiene el potencial de cambiar el mundo.
Toda la potencia Kawaii de Baby Metal debutará por primera vez en nuestro país este 1 de noviembre en Basel Venue como un sideshow completamente sold out previo a su presentación el día 2 de noviembre en KnotFest Chile. Las entradas están a la venta a través de PuntoTicket.