Nota por Litta, Fotos Cristian Carrasco
Lo vivido el pasado lunes en el Teatro Coliseo fue un espectáculo sin precedentes, cargado de emociones varias y mucho virtuosismo, una jornada que no dejó a nadie sin la sensación de llevarse consigo un gran recuerdo para la vida y el soundtrack de ésta. Maravillosamente, ya está consolidado un sello en los shows de Jinjer en nuestro país, para ser este el segundo, la atmósfera que se gestó tanto entre el público asistente y las bandas en general, consolidaron una relación íntima con los ucranianos y que además terminó una de las esperas más importantes para la escena metal del territorio, aunque el carácter de la fanaticada no fuera el típico estereotipo del metalero.
Desde muy temprano y puntuales las agrupaciones invitadas a ser parte de la antesala de este ritual y oda al género, se presentaron con un excelente recibimiento y por qué no, si la calidad del producto presentado fue de gran nivel. Before Breathing fueron los primeros en subir a las alturas del teatro, con una sólida presentación que quedo demostrada en la forma de interactuar con el público, junto a un estilo musical bien dominado que nos hizo a varios pasar un excelente momento de apertura. Llegado el momento de la segunda banda telonera, los ánimos y la multitud ya gozaban de una densidad más notoria. El turno de We Are The Monster, fue un gran presagio para lo que estaba por venir, la performance y la indumentaria de estos nacionales fue un deleite para quienes estábamos esperando una previa de alto nivel, sinceramente una agrupación que desde su originalidad y devoción por lo que hacen han solidificado un excelente material que está ya listo para la exportación, un show muy bien ejecutado que le valió a estos nacionales ser ovacionados por todos los asistentes.
¡Puntuales! Como era de esperar los titanes de ucrania, Jinjer, hacían su entrada y el teatro rugía de emoción, cuando era el momento de recibir a la magnánima genia de las voces, Tatiana, la locura se desató y no hubo tregua, a pesar de no ser un clásico mosh constante, el enérgico mar de gente supo imponerse a través de los cantos, los saltos y los gritos, que unánime corearon todas las canciones, como si se tratase de un coro infernal que hacia retumbar hasta la última molécula del recinto. Sin lugar a dudas el sector más privilegiado para gozar de la magnificencia de la acústica era en los cielos del coliseo, esto por la ya conocida posición de los parlantes que convierten a la trayectoria del sonido en una propagación más uniforme para el público ubicado en las alturas, los bajos se percibían mucho más que en la cancha aunque el rebote de la voz lirica de la frontwoman era una exquisita ofrenda para los tímpanos en todas las ubicaciones, sencillamente un placer que se conjuga de una forma maestra con los guturales que despliega esta cantante.
El nivel de tecnicismo con el que tocan Roman Ibramkhalilov, Eugene Abdukhanov y Vlad Ulasevich, rinden catedra de la importancia que tiene la pulcritud en la composición, hecho que se consolida con una puesta en escena sobria que no necesita gran despliegue para colisionar los corazones auditivos de sus fans, quienes se manifestaron con gran admiración en cada termino de canción, por lo que atribuimos esto a una discografía que sin gozar de una ostentosa cantidad, deja claro que cada disco que han sacado es un sólido producto que mejora no solo con el paso de los años, sino que además con cada interpretación en vivo.
Lo más emocionante que se vivió en esta velada fueron las intervenciones de la cantante, en donde no tuvo reparos en expresar su cariño por el publico chileno, por su puesto también fue algo considerable ver como sus orígenes se dejaba ver a través del maravilloso juego de luces, que sutilmente entregaron un mensaje con los colores de su símbolo patrio.
Un setlist perfectamente confeccionado para quienes han disfrutado por completo la trayectoria de esta gran banda, que ha sabido evolucionar su sonido por más de una década de actividad, que además no cabe duda que existe hoy un gran lugar importante en el corazón de sus fans chilenos. Finalmente, una segunda visita que queda instaurada como una gran y memorable noche, que se repetirá porque ya es una promesa.
Setlist
Sit Stay Roll Over
On the Top
Pit of Consciousness
I Speak Astronomy
Disclosure!
Judgement (& Punishment)
Sleep of the Righteous
Teacher, Teacher!
Perennial
As I Boil Ice
Pisces
Home Back
Call Me a Symbol
Captain Clock
Vortex
