Ana Tijoux
27 de marzo 2015 | Teatro Cariola
Es sabido que a estas alturas de la vida, Ana María Merino Tijoux no tiene por qué demostrar las merecidas credenciales que les ha valido de elogios unilaterales en las tablas que pise. Tanto aquí, como en escenarios internacionales, su show demuestra el giro de tuerca hacia un formato más orgánico sin ser pretenciosa ante sus mismas composiciones. Por ende, los 11 músicos que por estos días enfilan la banda con firma propia, gradúan –sí, en nuestro país, créalo-el buen momento de la liristaante un espectáculo vendido sin más parafernalia que el show en solitario de la ex Makiza,evitando luces y campañas de marketing exacerbadas para llenar “por llenar”. Acá su nombre vale y el público así lo demuestra.
Ante un renovado y muy copado Teatro Cariola, el cónclave del “mes de la mujer”, cae -a las 21:10- tras el estreno del cuarto clip de “Vengo” (2014), ‘Antripatriarca’.Obra realizada alrededor del mundo con el leitmotiv de la supervivencia y el instinto materno de diferentes culturas. Propuesta que ganó aplausos mientras Beatriz Pichimalen preparaba su intervención de cantos autóctonos “hacia la luna” de los ya extintos selk’nam, pehuenches y mapudungun. Comienzo alternativo ad-hoc a la celebración en curso.
Entre Bronces, scrach, percusiones y MCs, Anita y compañía entregaron quizás una de las introducciones musicalmente más soberbias que al menos en lo personal haya visto en los shows de Tijoux. Pregón acabado en técnicas de big band que de golpe dan pase a ‘Antipatriarca’, esta vez, interpretada en vivo. Músicos que no supieron de descansos tras la pista que da título a su consolidación (‘Vengo’) y ‘Errositas’ junto a nada menos que su compañero de rimas, Hordatoj, otorgan a lo que será una de las tripleta irremovibles de aquí a un buen tiempo más.
Luego, tras el mashup de ‘Las cosas por su nombre/A veces’ y con un respaldo de músicos todos de calce
negro, la pista que llegó a los oídos de los productores de BreakingBad, ‘1977’, convence y rompe prejuiciosal ver la transversalidad del público gozando el “famoso” track. Además, ‘Sacar la voz’, se postula con facilidad entre los highlights de la nochepor medio de su carga emocional retroalimentada en atmósferas de reflexión y respeto. Para quienes conocen más a fondo la forma en la que se gestó la obra, la excusa para ver a Anita tuvo un valor más que agregado. También, ‘Los peces gordos no pueden volar’, las intervenciones sobre los femicidios y el regalo tras el cover de Astor Piazzola (‘Vuelvo del sur’) entre secciones de cuerdas, pulen un show con ganas de trascendencia.
Luego de un break, cae sin escalas ‘Shock’ pegada a ‘Todo lo sólido se desvanece en el aire’, dupla de alto impacto que no quiso ser menor ante las que cedían: ‘Mi verdad’ con las ilustraciones de Malaimagen, ‘Delta’ junto a MC Niel o ‘Sube’ en compañía –nuevamente- de Hordatoj, daban cierre magistral a una noche cargada de sorpresas. Por fortuna no todo quedaría ahí, pues ‘En paro’, la cantante dio tiempo extra para que ‘Creo en ti’ (junto a Juan Ayala, ex Juana Fe) ‘Somos Sur’ y el cambio de vestuario por medio de ‘Gol’, celebren como se debe el necesario cambio de piel que muchos rumoreaban, su paso al sello Quemasucabeza. Arriesgada puesta en escena que deja a “Ana Tijoux& Los Más Buscados” abrazados ante las cámaras del local y haciendo reverencias ante una jugada y presencial fanaticada.
Sin subirse al carro de la victoria (como muchos medios los han hecho en estos últimos tres años), da para sacar pecho el ver a una artista que hasta el 2012 todavía publicaba sus tocatas vía Facebook. Ahora el momento es otro; teatros llenos y festivales internacionales son, por lo bajo, el dossier 2015 que la compatriota lleva a cuestas. Hay que decirlo: aunque costó, Anita por fin es profeta en su tierra.