DEEP PURPLE EN CHILE – LEGALIZE FESTIVAL
23 DE NOVIEMBRE 2014 | ESPACIO BROADWAY
Como la tónica del Legalize Festival tuvo muchos retrasos, algo a corregir para una siguiente versión, fui una de las que tuvo que elegir o ver a Ska-p o ver a Deep Purple.
Por un tema generacional, racionalicé la decisión y preferí esperar casi una hora a Deep acercándome poco a poco a la barrera. Tuve la suerte de quedar en primera fila y al medio donde suena y se ve perfecto.
Supe por amigos que Ska-P estuvo genial, destacaron la potencia y que tuvieron buena selección de las canciones que iban a presentar, entre ellas, “Legalización”, “Niño Soldado” y “El vals del obrero y “Gato López”. Muchos quedaron con gusto a poco, pero feliz que estuvieran acá antes de su receso, otros quedaron con ganas de ver a las dos bandas, otros simplemente se rindieron al cansancio y se fueron.
Luego de que Talib Kweli tuviera una impecable presentación de rap gringo he hiciera a todos “hacer ruido”, levantar las manos, bailar a su ritmo y pasado las 22.00 horas sale de escenario para dar paso a lo que la mayoría esperaba. Queríamos escuchar a los ingleses, realmente, tanto que bailamos rap para no movernos del lugar.
Casi a las 22.30 salen a escenario y había ansiedad colectiva. Noté que un grupo de rockeras, estuvo en la barrera desde que empezó el Legalize ¡sólo por Deep Purple!
Las luces y el polvo que levantó la ventisca hicieron lo suyo visualmente. Y en eso, sale Ian Paice se ubica en su estación, le sigue Ian Gillan, Don, Steve y Roger. Estilosos todos, viejitos, pero estilosos.
La introducción no pudo ser un misterio, ya sabíamos qué venía, es como la montaña rusa, sabemos qué va pasar, pero igual nos sobreexcitamos y la adrenalina fluye. Nos prendieron con el primer tema, “Highway star”, creo que en los primeros 10 segundos la gente logró soltar algo su ansiedad, ahora sí por fin tocaba Deep Purple y estábamos ahí.
¿Qué se podía esperar? Luego siguieron con “Into de Fire”, indiscutible comienzo del tema nos provocaba, por inercia, mover la cabeza, headbangueo incluido todos casi al mismo tiempo, hay que decir que la voz de Gillan ya no es como hace algunas décadas, sin embargo el esfuerzo porque viva el rock’n’roll de Deep nos lleva a preguntarnos “ahora qué?”. Recordemos que Deep nos visita en el marco de su gira “Now What?” por el decimonoveno álbum de estudio -del mismo nombre- de los británicos, desde el Rapture od the Deep en el 2005.
Luego vino el gran tema “Hard lovin’ man” y “Strange kind of woman”, el primero caracterizado por el comienzo de la guitarra sucia, y un bajo limpio y la segunda por un protagónico papel de batería y vocalizaciones. Extrañé algo de potencia en los altos vocales, pero se compensaba con la potencia del resto de la banda y además el público lo ya lo hacía por Ian.
El siguiente tema fue alucinante, “Vincent Price”, canción incluida en la última placa “Now what?!” con el alucinante y tenebroso comienzo de los teclados al mando de Don Airey y por supuesto, es un homenaje al mítico personaje, ícono de las películas de terror. El juego audiovisual, las luces y la música conjugaron una superlativa escena para un show de este nivel.
Para este momento, una intervención virtuosa, que no fue la única, un espectacular solo de guitarra, como antesala de “The well-dressed guitar”, sacándole el máximo provecho al instrumento, Steve el macho de pelo liso y largo, casi plateado por unos minutos fue el epicentro de la atención y adrenalina.
Siguiendo el solo de teclado, para introducir “Lazy”, para acabar luego con otro solo alucinante, entregando lo mejor de sí, señor Don, vaya intervención. En ese momento algo pude ver en las caras de los espectadores, y era de una sumisión sicodélica semi hipnótica. Tanto que la horda ansiosa del primer momento se calmó, tal como en la historia del Flautista de Hamelín. Seguía la ventisca, seguía levantándose el polvo, seguía el rock con Deep Purple.
Un poco de esa calma, alucinógena se fue con el místico “Perfect Strangers”, comenzó el headbangueo nuevamente, y nos sumimos, todos al rock. Siguieron con “Space Truckin” tema final del disco Machine Head y el aclamado “Smoke on the Water”, del mismo álbum, e himno icónico de la banda. Con este último tema hicieron el fin falso del show, para luego terminar realmente con “Hush” del disco Shades of Deep Purple y el single del 70’ “Black Night”.
Pese a que nadie quería que se fueran, esta vez sí se despidieron, agradecieron tirando baquetas y púas al público. Un gran corte y despedida.
Review: Celeste Jamacg
Fotos: Diego Mena
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