30 de noviembre 2017 | La Batuta
Nota: Freddy Veliz | Fotos: Álvaro Mánriquez
Jueves 30 de Noviembre, La Batuta, epicentro histórico de la música en vivo en la comuna de Ñuñoa. Jornada especial para una banda que hace un par de años lanzaba en el mismo lugar su disco debut, nos referimos al cuarteto La Mas Gorda, quienes en esta ocasión celebraban el término de su campaña crowdfunding, en ayuda de la publicación de su segunda placa de estudio, álbum que llevará el título de ‘eStar’, del cual nos presentaron algunos adelantos como un regalo a sus seguidores y los que apoyaron en esta campaña de financiamiento.
Entre el público se podían identificar fieles seguidores y seguidoras, que nunca fallan a show alguno de la banda, también músicos de distintas agrupaciones marcaron presencia en esta fecha especial, todos demostrando entusiasmo por vivir una noche de intensas y enérgicas guitarras, que por supuesto abundarían en este encuentro, que tuvo como apertura, la participación del poeta de la contracultura nacional Walter Contreras (La Carpa del Diablo), quien junto al guitarrista Felipe “Ganzo” Silva va repasando parte de sus punzantes textos, donde la crítica social se acompaña de un asertivo humor repleto de ironía. Contreras domina el escenario con maestría, y su stand up logra conectar con el público de forma directa, causando risas instantáneas. El característico timbre de voz de Walter es expresivo y cada frase está envuelta en una honesta y enrabiada forma de mostrarnos sus puntos de vista respecto al mundo en que vivimos. Un apertura distinta y potente a la vez, que tiene una relación concordante con el contenido lírico que abunda en La Mas Gorda, por ahí va la asociatividad de ser el invitado perfecto para esta gran noche en La Batuta.
Cuando ya estaba todo listo y dispuesto, el conjunto integrado por Mauricio Torres en guitarra y voz, Felipe Hugo en guitarra, Cristian Mardones en bajo y Benjamín Hugo en batería se apoderan del escenario y con un sonido de robustas características, nos presentan de entrada, parte de lo que se viene en ‘eStar’, álbum que tiene prevista su salida durante el primer semestre del 2018. Temas como “Soy de Aquí”, “Descenso”, “Arpegio” entre otros, dieron cuenta de lo que se viene en ‘eStar’, del que también pudimos conocer el tema epónimo, dedicado a esas personas que parten de este mundo. ‘eStar’ define la dualidad entre los que se van, y se transforman en iluminadas estrellas (star), pero que su presencia no-física se mantiene en la memoria y en cada lugar donde se le recuerda (Estar). De lo que pudimos apreciar solo podemos confirmar que el álbum contiene toda la fuerza característica de La Mas Gorda, con algunas sorpresas estilísticas, como la inclusión de una experimental figura cuequera entre sus tracks, o una pesada, densa y oscura estructura en el corte “Post Tenebras Lux”.
La banda evoluciona, y se cohesiona con mucha fluidez en el escenario, reflejando la unidad necesaria entre sus miembros para lograr una entrega sólida en vivo, desde la puesta en escena, sin mayores recursos que una iluminación bien coordinada, más el dinamismo que otorgan los músicos, moviéndose de un lado a otro en el escenario, cabeceando, o mezclándose entre el público, como lo hizo Felipe, no hacen más que fomentar la integración de todo un conjunto de elementos. Son tres generaciones las que componen el cuarteto, tres generaciones unidas por el amor a la música, con un objetivo bastante claro, según podemos vislumbrar desde el público y en backstage. Hay amistad, de esa que llega a niveles de hermandad, lo que fortalece aun más la propuesta, que el mismo conjunto denomina como Metal & Roll, conjugando términos para definir la fusión de sonidos que viene construyendo La Mas Gorda en estos años. En su anterior disco ‘Más’ ya lograron sellar su apuesta, con varias reversiones de temas ya registrados por La Gorda, banda predecesora del actual conjunto, con cambios sustanciales, un sonido mucho más pesado y de características metaleras, cimentan un congruente crecimiento dentro del estilo. De ‘Mas’ no faltaron cortes como “Hombre de Arena”, “Mal Papi”, “No te Necesito”, “Sangre de Mi Tierra” o “Cerdo”, todas coreadas por un público que llegó al local ñuñoino a pesar de ser día de semana, sin contar además el horario en el que las bandas se presentan en el lugar, para eso hay que tener agallas y mucho amor por el rock chileno, los que llegaron, así lo demostraron llegando en gran cantidad.
La Mas Gorda en un show de gran extensión deambuló por su carrera, presentando en sociedad la robustez de lo nuevo que se viene, haciéndonos partícipes privilegiados de un encuentro donde no se permiten dietas, engordándonos de puro y macizo metal&roll.
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