Por Dianne Salinas – Fotos: Andie Borie
Este fin de semana tuvimos Santiago Metal Festival, y la convocatoria fue en el Teatro Cariola, ubicado en San Diego. En esta oportunidad el cartel era bastante extenso, ya que fueron alrededor de 6 bandas nacionales invitadas a abrir el espectáculo.
Los alrededores comenzaron a congregar a los metaleros ansiosos por una tarde que reúne a 2 exponentes del death metal técnico como plato fuerte, hablamos de los norteamericanos Origin y The Faceless, que ya venían de revolucionar a Talca. Así que esperábamos una larga jornada cargada de metal.
A eso de las 4pm, y ya llegando la hora de apertura de puertas nos enteramos de que comienza lo que seria horas más tarde una lluvia de inconvenientes para el evento. La banda Visceral, por problemas con uno de sus integrantes que no logra viajar a Santiago, decide “bajarse” del show, lo que complica el horario y comienza a atrasarse más y más el concierto.
Pasada las 6 de la tarde, por fin se hace ingreso al recinto y la banda Repulsive es la encargada de iniciar. Los oriundos de Rancagua rápidamente entregan al público lo que llevaba horas esperando. Y aunque con algunos problemas de sonido que fueron arreglados de apoco, los nacionales dieron pie al comienzo avasalladoramente.
Stigmatized les sigue, entregando temas de su último trabajo, “Campos Carmesí”, y dentro de la ‘buena onda’ generada, dan algunos discos de regalos hacia la audiencia que cabecea al ritmo de los temas que van sonando. De a poco el recinto comienza a aumentar la asistencia, pero el Teatro no logra llenarse por completo aún.
Sabemos que este lugar (Teatro Cariola) tiene una acústica difícil de contener, pues va de la mano con la convocatoria, sus amplios palcos y altas paredes hacen que el sonido no pueda contenerse como es debido, pero eso no impidió que la cita siguiera su caudal. La música debía continuar.
Son alrededor de las 8 y Entomos comienza a equiparse en el escenario. Los riffs y pruebas de sonido pasan rápidamente, el público se junta para recibirlos y los gritos, cánticos y saltos de las manifestaciones no dejan de estar latentes, a modo de coro comienzan a escucharse al unísono “el que no salta es paco”, lo que da una excelente inyección de energía al lugar. La banda de metal progresivo entrega material inédito de su próximo proyecto para este año y deja a un Cariola contento hasta con ‘selfie’ incluida.
Cerca de las 21 horas Recrucide es la siguiente banda en el cartel, muy esperados por la audiencia, muestran de que están hechos e independiente de los problemas que existeron hasta esa hora, los chicos logran entregar buen material, buenos riff y logran un sonido en equilibrio. Para ir despidiendo la cartelera nacional, suenan temas desde Svpremacy y The Cycle.
La última agrupación antes del plato fuerte debería ser “Ritual Of Flesh”,pero los horarios están demasiado atrasados y las bandas principales deben tocar. Ante estas dificultades y tristemente se decide por quedar fuera del concierto.
Con 2 horas de retraso del ‘timming’ esperado del evento, Origin sube al escenario, todos están expectantes y comienza al fin la resonancia de la masacre. Lamentablemente en esta oportunidad los problemas de sonido salen a relucir nuevamente y hay bastantes dificultades para poder conseguir los ajustes del nivel que Origin necesita al momento de hacer su trabajo sobre la tarima.
Repasando trabajos desde ‘Origin’ hasta ‘Unparalleled Universe’, Jason Keyser hace hincapié a los años de experiencia que tienen en el death metal técnico y donde la composición en estructuras caracteriza a la banda.
Algunos de los asistentes entre el público se encuentran bastantes inquietos y desde la multitud llegan un par de botellas plásticas al escenario, esto ocurre en mas de una oportunidad por lo que Jason, sumamente molesto pensó en dejar de tocar. Con esta advertencia y la molestia del respetable en general ante tal indiscreción y falta de respeto, el espectáculo continuó y deciden pasar por alto tamaña vergüenza que queda a modo ‘mancha borrosa’, de una jornada que ha sido ya difícil de sobrellevar.
La complejidad de la banda no puede disfrutarse al máximo, pero aun así el recinto está totalmente atestado de los riff y baterías a modo ‘apocalíptico’, en donde cada integrante manifiesta su capacidad de tecnicismo y que acompaña a un buen ‘mosh’.
The Faceless comienza a instalarse pasada las 23 horas, los espectadores ya nos encontrábamos algo agotados después de que ha sido muy larga jornada con pros y contras. Pero, listos para seguir cabeceando con otra banda que si o sí hay que disfrutar.
Al principio, los norteamericanos tienen problemas porque no cuentan con ayuda y soporte para poder ajustar los instrumentos así que, la demora se transforma en algo un tanto molesta y la gente dentro del cansancio espera de mala gana. Esto se termina de inmediato cuando comienza el show y The Faceless recarga automáticamente a los asistentes.
Los guturales resuenan como cañon y Michael Keane y compañía son capaces de generar un mosh de inmediato. El estilo de esta banda, brutal death metal técnico, progresivo y a veces deathcore, hace el enlace perfecto para que los fanáticos de la banda sean de distintos gustos y todos se unan a una celebración de aquellas que dejan con tortícolis.
Corte tras corte, paseando por la discografía de la agrupación, desde el “Autotheism” al “In Becoming a Ghost” no decae el ambiente que tiene la muchedumbre, fue una ardua espera y ahora se está disfrutando.
Llega el momento de cierre y así culmina una jornada, extrema en muchos sentidos. A mi parecer, la parrilla para el día de hoy tenía puro filete, pero los problemas de organización, sonido, y mala suerte decayeron en lo que se esperaba un espectáculo alucinante.
