ÉTER & RENDER
ELE BAR DE VALPARAISO | 24 DE ENERO 2013
Por Mario Molina Leiva
Una noche de rock puro, pesado y a la vena fue lo que vivimos el jueves recién pasado en el puerto de Valparaíso, de la mano de dos tremendas bandas locales como son Éter y Render, quienes, salvando ciertas diferencias estilísticas, se caracterizan por ser dueños de una impronta y de una energía difícil de encontrar hoy por hoy en el medio nacional.
La primera agrupación en subirse a las tablas es Éter, banda porteña que viene haciendo ruido desde el 2007. Contando con un EP/DVD de 5 temas lanzado el año 2010, la banda formada por Giorgio Arata en la voz, Gabriel González en los sintetizadores y voces, Gabriel Figueroa en el bajo y voces, Victor Santiago en las guitarras y Leo Zahr en la batería nos presenta desde un principio una muestra de un estilo bastante peculiar. Si bien tiene la esencia de un rock progresivo más actual, Éter vienen a entregar un sonido mucho más fresco del esperado, con una impecable ejecución por parte de sus músicos y utilizando de muy buena forma en sus composiciones los recursos que el estilo pone a sus pies. Con una mezcla de sonidos heredados de un sugestivo cúmulo de influencias, podemos identificar entre sus ritmos y arreglos, referencias al funk o al jazz, entre otros, y a las raíces latinas que nos identifica a todos dentro de sus temas, pero siempre dentro del genero que le corresponde.
Éter nos presenta un show interesante, donde la música es la protagonista: una atmósfera especial para cada tema es la expresión del rol que los sintetizadores se encargan de generar desde distintas perspectivas, tomando a veces el protagonismo de manera sobresaliente, complementándose de muy buena manera con una guitarra que interviene cuando debe, alternando entre riffs complejos y solos precisos. Desde las bases, un bajo que se roba la película nos sorprende en varias ocasiones, ya por sus intervenciones melódicas como también el dominio de las líneas rítmicas que se conjugan con una batería que controla los momentos y detalles que cada tema requiere con un manejo rítmico destacable. Gran rol juegan en esta banda los arreglos vocales, interesantes armonías que contribuyen en gran medida al ambiente que buscan generar en cada tema, y por cierto, una voz principal descollante, que maneja de muy buena manera las intensidades que se marcan a través de la presentación, y para que no decirlo, un buen manejo escénico. Líricas interesantes, cercanas e intimas nos dejan al final la sensación de que existe una admirable complicidad entre todos los elementos en sus composiciones, complicidad que se transmite cabalmente al público (cosa que se agradece!).
Dando un giro totalmente divergente en relación a la anterior presentación, llega al escenario de Ele Bar una vorágine de guitarras afiladas, ritmos cortantes y un sonido crudo que te cala los huesos: Render. Frases y Cenizas es el título de la primera entrega de este power cuarteto, integrado por Julián Oyanedel en la voz y guitarra, Juan Pablo Sotz en la guitarra solista, Ignacio Carvajal en el bajo y segunda voz, y Tomás Valeri en las baquetas, lanzada a fines del año recién pasado, en el mes de octubre. Acreedores de un estilo portentoso, no pierden el tiempo y entran de lleno a lo que los convoca con un show atractivo, tanto por el desplante de los músicos, quienes se hacen dueños del escenario en esta ocasión, como por la prolija forma en que se desenvuelven en cada uno de los temas que presentan.
De entrada y a quemarropa, nos llegan de frentón unos riffs contundentes y una guitarra solista impecable que toma posesión del espectáculo cuando le corresponde, haciendo juegos interesantes con una segunda guitarra que complementa para generar un ambiente de puro rock and roll. Nos encontramos con un bajo que destaca por su peso descomunal, que se lleva encima las lineas rítmicas bien marcadas por un género que lo exige sobremanera, y una batería potente y protagonista que maneja las intensidades de manera notable. Difícil es obviar la actitud del frontman y vocalista de la agrupación, quien con un desplante escénico no despreciable, y una voz remarcable y potente, que pega de lleno y de manera precisa en lo que el estilo requiere, termina por convencernos que los chicos de Render saben lo que hacen, y lo demuestran en cada una de sus canciones, como también en sendas versiones de Killing in the name of de Rage Against the Machines y Shine de Collective Soul, que interpretaron en esta ocasión.
Una noche redonda es lo que nos deja el balance de esta velada: dos bandas que se lucieron con un espectáculo potente, original, de gran calidad musical tanto en su ejecución como en lo rico de sus composiciones, en sus respectivos estilos, y que nos dejan expectantes para encontrarnos con ellos en una próxima oportunidad, lo que en el fondo nos demuestra una vez más como es que este puerto es y seguirá siendo un semillero del rock nacional que tanto nos apasiona.
Fotografías por Mario Toro
www.mtaudiovisual.cl
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