Foto: www.agendamusical.cl
UDO en Chile
21 de noviembre 2015 | Club Blondie
Review: Freddy Veliz
Udo Dirkschneider, el pequeño gigante del heavy metal alemán, regresó a Chile para presentarnos parte de Decadent, su nuevo álbum de estudio, y para entregarnos mucho de su catálogo clásico con su banda solista y lo que fue su inolvidable paso por los legendarios Accept .
Recibido por una gran cuota de fanáticos de los sonidos más clásicos del metal en Club Blondie, el vocalista germano junto a su banda, en la que recientemente se integró su hijo Sven Dirkschneider en la batería, no hizo más que avalar su peso como una de las leyendas más carismáticas y constantes del género. El repaso de cortes de su álbum debut con U.D.O., Animal House (1987) o de sus más recientes publicaciones, demuestra su lealtad por mantener vivo el heavy metal de tradición, sin desmarcarse buscando nuevos lenguajes, pero como podemos vislumbrar en discos desde Mastercutor en adelante, sin perder un ápice la modernidad necesaria para mantenerse vigente.
El público reconoce a la leyenda que tiene en frente, y reacciona con algarabía con cada uno de los temas elegidos en esta gira, que lo trajo de vuelta luego de su recordado paso por la primera edición de The Metal Fest el 2012, esta vez con show más extendido que aquella vez, por lo que las expectativas estaban dadas por apreciar a Dirkschneider en plenitud. Y qué bien se mantiene el teutón, su voz se escucha intacta, a sus 63 años de edad y más de 35 de carrera artística su calidad como frontman no decae, y eso siempre los fans más acérrimos sabrán valorarlo, y así quedó demostrado en las profundidades de la mítica discotheque santiaguina.
Puños en alto, y voces coreando “Decadent”, “ Black Widow”, “Untouchable”, “Metal Machine” entre tantas otras que repasó de su catálogo propio. Sin embargo, lo más celebrado llegaría en la parte final, cuando Harrison Young, aparece solo tras el teclado, y comienza a interpretar la reconocible “Für Elise” de Ludwig Van Beethoven, lo que ya nos preparaba para lo que se venía, las guitarras nos introducen en la “Marcha Eslava” de Tchaikovsky y resuena “Metal Heart” en nuestros oídos, tremendísimo clásico de su ex banda, los dados estaban echados, y el público corea hasta los riffs y el sofisticado solo intermedio. La seguidilla de clásicos de Accept con la melódica y pegajosa “I’m a Rebel” del segundo disco de la clásica agrupación, lanzado en 1980; “Princess of the Dawn” cantada por los presentes como si de un ejército marchante se tratara; Luego Udo nos invita a cantar en conjunto el cántico tradicional “Heidi, heido, heida” (extracto de Ein Heller und ein Batzen), que abre “Fast as a Shark” para entrar de lleno a la velocidad de este clásico considerado como un pilar en el origen del speed metal, detonando en un mosh pit frente al escenario; Para el final el denso riff de guitarra para “Balls to the Wall” fue apoteósico, y cada voz, desde cada rincón del recinto acompañó al gran Udo en los coros, un final antológico para despedir estos incombustibles clásicos, que por última vez sonarán en vivo en un tour del cantante, así lo anunció al partir la gira, por lo tanto los que estaban enterados, seguramente cantaron con todas sus fuerzas y desde ese corazón de metal que llevan dentro.
UDO es una marca registrada que sigue como un indestructible panzer manteniendo viva la épica y el espíritu del verdadero Heavy Metal, ese que hizo tan grande a su ex banda y que lo convirtió él en uno de los frontman más respetados y queridos de su historia. Lo esperamos de vuelta.
