Underoath: Aferrarse a la remembranza

Por @pvpularmonster / Fotos: @nelsongalaz.cl

La larga espera llegó a su fin cuando los padres del metalcore volvieron a encontrarse con sus fieles chilenos, en un Teatro Teletón lleno de fanáticos que crecieron con su música y estaban listos para verlos tras 12 años desde su última presentación en nuestro país. 

El ambiente era de ansias, alegría y felicidad, marcado por la presencia de aquellos que siguen a Underoath desde hace muchos años, y que se presentaron fielmente al llamado del reencuentro. Faltando diez minutos para el comienzo del show, empezaron a sonar los primeros silbidos pidiendo por la banda, seguido de aplausos entusiastas demandando su pronta aparición. 

Sin guardarse las emociones, la audiencia llenó el recinto con sus gritos cuando, después de una agónica espera, las luces se apagaron y los integrantes ingresaron uno a uno al escenario, efervescentes y entusiasmados, decididos a ofrecer un espectáculo digno del ímpetu, dedicación y pasión con la que entregan su música, listos para deleitarnos con sus más memorables melodías. Y es que, si bien traen consigo su más reciente álbum, Voyeurist (2022), no dudaron en regalarle a sus fans un viaje por sus clásicos que los posicionaron como una fuerza única en la industria, inundando el recinto de nostalgia. 

Las ansias por el comienzo del show ya no daban para más, tras 20 minutos de retraso y la evidente molestia de los presentes, el mal rato fue perdonado inmediatamente tras el comienzo de Take A Breath, donde los asistentes comenzaron a cantar y saltar haciendo uso de toda la energía que traían consigo. La emoción contenida se desató prontamente con Writting On The Walls como segundo tema, escuchándose un coro unísono junto con una coreografía de headbangings disfrutando eufóricamente. 

El espíritu de la multitud le hacía justicia a la fama del público chileno como uno de los mejores de todo el mundo, en el cual Spencer Chamberlain se dio el tiempo de dedicarle unas palabras a sus oyentes y prometió que no tardarían tanto tiempo en regresar, e incluso pidió un poco más de emoción puesto que consideraba que este podría ser el mejor show de todo el tour y que los chilenos éramos “unos p*tos locos”. 

Volver a conectar con la emoción que se sintió escuchar como adolescentes a Underoath, y hoy como adultos, fue el ambiente predominante durante todo el show. Con un público que tranquilamente, pero con entusiasmo, coreó las canciones, saltó, bailó, y disfrutó como si no existiera nada más que ese momento, la banda conectó con ellos y aprovechó al máximo cada minuto.

Los espectadores manifestaron un nivel de energía que se mantuvo durante todo momento, destacando el segundo en el que comenzó a sonar Reinventing Your Exit, en el cual se desataron completamente y aquellos que estaban al costado de la cancha corrieron para unirse a los saltos del sector frente al escenario, como si corrieran a encontrarse con un viejo amigo. Incluso, ni siquiera las lesiones eran impedimento para disfrutar, pues entre todos los brazos levantados fue posible ver más de una muleta en el aire saltando con todo el resto. 

El corazón de los más nostálgicos se rompió cuando jugaron con la ilusión de que escucharían When The Sun Sleeps, tocando varios acordes que daban la impresión de lo que se venía. No obstante, Chamberlain prometió tocarla cuando volvieran, si es que hablaban lo suficiente de la banda y el show para que las productoras los trajeran nuevamente. 

Sin presentar mayores problemas, los estadounidenses terminaron con A Moment Suspended in Time y A Boy Brushed Red Living in Black and White, poniéndole broche de oro a una jornada cargada de emoción y felicidad. Sus seguidores cantaron a todo pulmón con todas sus fuerzas y emoción los últimos minutos junto a esta icónica banda que saldó su deuda tras demasiados años de espera. 

El concierto de Underoath marcó una noche especial en la que los asistentes conectaron con un profundo sentir de una época que nunca podrá abandonar del todo sus corazones. Ahora, sólo queda esperar a que cumplan su promesa y no permitan que pase otra década sin presentarse en nuestro país. 

Setlist

1. Take a Breath
2. Writting on the Walls
3. In Regards to Myself
4. Hallelujah
5. It’s Dangerous Business Walking Out Your Front Door
6. Breathing in a New Mentality
7. Illuminator
8. Too Britght to See, Too Loud to Hear
9. Reinventing Your Exit 
10. You’re Ever So Inviting 
11. Let Go
12. Damn Excuses 
13. Down, Set, Go
14. A Moment Suspended in Time
15. A Boy Brushed Red Living in Black and White