Por Freddy Veliz O.
El cuarteto capitalino KINTRAL nos convoca en Subversión, su última placa de estudio lanzada en formato físico el 2013 (luego de liberarlo digitalmente a fines del 2012), a un intrincado recorrido musical y conceptual, rodeado de imágenes oscuras y existenciales, que apoyadas en una amalgama de estructuras algo difíciles de absorber desde una primera escucha, va atrayendo al oyente de manera paulatina mientras va revisitando esta extraordinaria muestra de metal contemporáneo de mirada vanguardista.
Con una temática conceptual, el álbum se desenvuelve en una línea de tiempo, representada en la numeración de sus trece temas divididos en dos partes cronológicas desde el -6 hasta el +6, ubicándonos en un desarrollo temporal que se inicia con “Big Bang”, sombrías y explosivas notas desde el teclado que me recuerda a Diamanda Galas, nos abren las compuertas para un viaje de metal sincopado con aires espaciales, industriales y oscuras vocalizaciones. Compases rítmicos a toda velocidad se entrecruzan con medios tiempos introduciéndonos en un clima de connotaciones cósmicas. Algo menos intrincado estructuralmente es el comienzo de “De Carbono”, corte que va gradualmente creciendo en intensidad, desde simples riffs se va encaminando a una atmósfera catártica al tiempo en que se acelera el pulso al límite.
“De Creencias” es una mirada particularmente crítica de lo que conocemos del origen del hombre y el concepto de Dios, según el libro bíblico del génesis. Instrumentalmente logran una atmósfera oscura y de tintes épicos en las voces, pieza magistralmente lograda.
La reflexión crítica continúa con “De Bastardos” manteniendo la amalgama musical en que se va desarrollando el disco. La batería marca el paso para meternos de lleno en “Sobre Amor” y luego ser impactados por la velocidad de “Sobre Nihil” una sabia destrucción de lo sagrado y la fe, para llegar al punto cero y seguir camino a través de una caja marchante acompañada de lúdicos efectos de guitarra que son el punto de entrada a “De Materia Oscura”.
La música de KINTRAL es imposible poder encasillarla, compositivamente inundada de complejas variantes, que en Subversión traspasan barreras que van mucho más allá del metal, algo así como a una vuelta de tuerca dentro del género. Seguramente esto se produce por las inquietudes de su voz y principal artífice del concepto y propuesta de cada composición, Juan Manuel Quinteros, quien se desenvuelve además en el mundo de la música docta, donde cuenta con varias composiciones a su haber, que incluso han sido galardonadas y presentadas en diversos escenarios, empezando por el Teatro Municipal de Santiago.
La densidad de “De Lúbricos Sentimientos” antecede a “De Identidad” corte con guiños orquestales que potencian a las voces en el coro, dotándolos de una exquisita atmósfera llena de fuerza y expresiva oscuridad.
Con “De Guerra Fractal” pasamos de la velocidad extrema a los compases mas reposados e introspectivos de “De Silenciosa Aceptación” para finalizar la placa con “Big Rip” donde al igual que en “Big Bang”, hay cierto arraigo a temáticas físicas y cósmicas en su contenido lírico.
Un álbum que se debe ir degustando con calma y atención. Una jugada renovadora por parte de la agrupación chilena, que no se rige por los tópicos tradicionales del metal, sino que experimentan con éxito una veta más vanguardista, donde los cromatismos melódicos van desafiando al auditor a visionar de manera estrictamente personal lo que se escucha.
Sin dudarlo, estamos ante una obra íntegra y original que renueva el sonido del metal en Chile con distinguida brutalidad.
Concreto Records 2013
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