COAL CHAMBER, Blondie 9- Sept.- 2012-09-10
Por Freddy Veliz
En estos días en que lejanos se ven los tiempos que reinaba el Nu-Metal en el orbe, Coal Chamber, los californianos que en la segunda mitad de los 90s aparecieron para acrecentar la oferta de bandas lideradas por íconos como Korn o Deftones, reaparecen con una gira que los trajo por primera vez a nuestro país. Por fin llegaba la fecha programada para la cita en el Centro de Eventos Blondie, y sus más acérrimos seguidores podían cumplir el sueño de ver a Fafara y compañía en pleno.
Con tres bandas nacionales abriendo los fuegos, lo que se agradece , y pasadas las 22:00 hrs la agrupación estadounidense salía al escenario y de partida fusilan a su público con el single que los hizo conocidos a nivel mundial, “Loco”, no hubo misericordia con nadie, Buzz, Miguel, Mike y la bella Chela (su nueva bajista), ponían de manifiesto que a pesar de los años transcurridos, la fuerza y energías están más presentes que nunca, sin dar espacio para el descanso arremeten en seguida con “Big Truck” otro corte de su homónimo primer disco de 1997.
Luego del saludo de su líder, continúan con “Fiend” de su último disco de estudio “Dark Days” del 2002, Fafara aporta su cuota de matices sonoros cantando a través del megáfono y el recinto está al borde de caerse a pedazos con el poder explosivo emanado desde el escenario. Cuando ya no había respiro Meggs se lanza con el riff arrastrado de “Rowboat”, a este le siguen “Something Told Me” y tras el saludo y palabras en español de Miguel “Meggs” Rascon, el delirio del público sigue desatándose al son de “Clock”, muy buen corte de su álbum debut.
“Dover”, “Not Living”, “Dark Days”, “I”, no dan tregua para que la pista se transforme en una incontrolable demostración de euforia, y gargantas forzadas al límite….Cuántos de los presentes la mañana del Lunes habrán sufrido las consecuencias de una molesta disfonía. Pero la experiencia vivída será inolvidable para muchos de ellos.
La por momentos industrial “No Home” antecede a “Watershed” no importaba ya el cansancio pero era imposible para los presentes abstenerse a seguir saltando y participando del mosh que se hacía interminable luego de que la avalancha de potentes y enganchadores riffs continuaba con ”Oddity”.
“Maricon Puto” da paso al encore, y Buzz Fafara invita a su legión de seguidores a corear las primeras frases del tremendo “Sway”…..” The roof the roof the roof is on fire….We don’t need no water let the motherfucker burn ….Burn motherfucker burn….” brotaba violenta de las gargantas de los que llegaron entre la tarde y la noche del Domingo al emblemático establecimiento de la Alameda Bdo. O’’Higgins. Un clásico que puso el broche de oro a un acontecimiento histórico para los fanáticos del género que nació en plenos 90s y que a fines de esa década mostró un claro decaimiento y agotamiento de ideas, pero que anoche demostró que aún existe y en gran forma.
Al final todo se convirtió en locura cuando Miguel Rascon lanza su guitarra contra la batería y salta sobre el público, tal fue su temeraria acción que Mike Cox no quizo ser menos e imitando a su compañero de banda también salta desde el escenario, teniendo que ser rescatado por personal de seguridad, pero no le bastó y tercamente vuelve a lanzarse, esta vez lo note salir algo preocupado desde la multitud ya que por lo que alcancé a captar estaba siendo ahorcado (involuntariamente) con el cuello de su polera que ya había sido prácticamente rasgada en su totalidad. Fue nuevamente rescatado y como si de una guerra volvía, se retiró del escenario lanzando los pequeños y transpirados retazos de su vestimenta a los mismos que se la arrebataron.
Un concierto del que sinceramente no tenía muchas expectativas, pero que fueron indudablemente superadas por el potente show, en que el sonido estuvo a un muy buen nivel y con una gran organización como ya nos tiene acostumbrados la productora a cargo.
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