Por María José Sandoval.
Ciertamente Marvel no nos ha dejado descansar, marcando a cada uno de los filmes como los más esperados en el cine. Desde Pantera Negra en enero de este año y Avengers: Infinity War hace unas semanas, que ha marcado los records durante estos días, viene con buenas expectativas la siguiente entrega del aclamado antihéroe.
Esta vez de la mano del mismo director que John Wick y “V” de Vendetta, David Leitch, y de 20th Century Fox, nos traen la trama de Wade Wilson o mejor conocido como “Deadpool” (Ryan Reynolds) y su intensa idea de formar un grupo de mutantes, a los que llamará la “Fuerza-X” (X-Force), para proteger a un joven mutante de un soldado y viajero del tiempo.
Sin duda una combinación extraña de leer, pero que sin embargo funciona muy bien en pantalla, y que recuerda en cada escena, que con Deadpool, realmente, todo es posible.
Familia e irreverencia
Y cuando decimos que todo es posible, lo creemos con los primeros minutos en pantalla, en donde podemos ver el otro lado de Wade Wilson, y no solamente a aquel personaje de malla roja que suele disparar chistes a diestra y siniestra, y que resulta ser algo un poco nuevo y desconocido.
Aun así, y aunque contenga solo un poco de esto, no descansa en la intención de encender aquella chispa humorística y de acción, aquella que nos sitúa en el negocio de Wade y en su búsqueda de los “chicos más malos”, y que en compañía de sus viejo amigo Dopinder (Karan Soni) y Weasel (T.J. Miller), se encontrarán en un escenario realmente inesperado.
Es de esta forma como se reúne al “X-Force”, conformado por rostros conocidos como los de Zazie Beetz (Domino), Terry Crews interpretando a “Bedlam” e incluso con Bill Skarsgard como “Zeitgeist”, con quienes aunque tengo mis reparos, logran ser un grupo bastante llamativo y carismático a la hora de acompañar a nuestro protagonista a una nueva misión. Sin embargo, quien se roba parte de esta atención, a mi parecer, es el aparente antagonista de esta historia.
Así es, porque una película no era suficiente, sino que Josh Brolin vuelve a hacer de las suyas bajo la compañía de Marvel, pero esta vez no para hacer un chasquido con sus dedos y tratar de eliminar a todo el universo, sino que para interpretar a “Cable”, quien irá en el camino opuesto de Deadpool y se lucirá en las escenas de acción, y que además, pone a prueba que no lo hará solo porque sí, sino que las razones podrían ser suficientes como para entender su
causa.
La irreverencia viene por cuenta de la casa, y es que el mercenario bromista de Wade da cabida para molestar hasta los más recientes, y no tan recientes filmes, de las compañías de superhéroes, a menciones de actores y espacios para clásicos musicales, creando ese mismo ambiente que pudimos ver antes en pantalla grande, y que por ese lado nunca te decepcionaran.
No todo es miel sobre hojuelas
Aunque la película es a momentos excepcionalmente chistosa y posee más referencias, en tono de burlas que antes, hay ciertos reparos que debo mencionar, y eso se resume a la mismísima X-Force, y es que me decepciona un poco el protagonismo que esta puede llegar a tener.
Por sobre todo los grandes rostros que son expuestos en cámara y los potenciales personajes que tienen, la X-Force resulta no tener un gran campo en esta historia, aunque por ese lado, quienes logran brillar son los personajes nuevos como el joven “Russell” (Julian Dennison) e incluso el gran Coloso, interpretado por Stephan Kapicic.
A pesar de este pequeño reparo, la segunda entrega de Deadpool apela a la familia, a la comedia, a los lazos de amistad y a la violencia y la acción con un buen ritmo en cada una. Es un largometraje que, a pesar de las críticas iniciales que pudo haber tenido por algunas figuras de la audiencia estadounidense, está sumamente bien balanceada, y con tomas de acción muy bien hechas.
Es inesperada, entretenida y que, si ya eres frecuente espectador de las piezas cinematográficas de superhéroes, te hará reír muchísimo con el toque único que tiene el antihéroe de Marvel.
Deadpool se estrena el 18 de mayo, y estará disponible en todos los cines del país.
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