Por María José Sandoval.
Si de algo estoy segura, es que me reservé este comentario para el final. Quería pensármelo, quería saber la opinión de la gente justo al momento de su estreno en televisión abierta, a solo un día de la celebración de los Premios Oscar.
Sin embargo, lo que me encontré en las populares redes sociales, distaba mucho de lo que realmente me pareció nuestra “Mujer Fantástica”.
Lo primero que hay que decir, es que las películas chilenas, muchas veces, gozan de una especie de “mala reputación”. “Exceso de sexo” (algo que en ocasiones es realmente innecesario), “mal desarrollo de guiones”, “exceso de garabatos” y la explotación de temas como la dictadura en nuestro país, o al menos son estos los altibajos que suelo oír, a veces incluso repetir y leer.
Y es verdad, los temas de este estilo muchas veces no funcionan y terminan siendo exhibidos como los filmes “obligatorios” en las escuelas, algo cuya palabra ya corta el romanticismo de ver una película chilena.
Pero hay que recalcarlo. “Una Mujer Fantástica” no es eso, y resalta desde un comienzo con su introducción, una simplemente suave y bella, así mismo como su protagonista.
No goza de los famosos clichés de los que tanta queja había oído antes, pero tampoco deja a un lado la importancia de entregar un mensaje. Uno fuerte y que impera actualmente en nuestra sociedad chilena.
“¿Ese es su sobrenombre?”
Nuestra protagonista es Marina Vidal (Daniela Vega), una mujer en cuyo filme se muestra firme y fuerte y que en un principio, vive una historia de amor.
Su pareja, Orlando, (Francisco Reyes), pertenece a una familia de buen pasar económico, o al menos eso descubrimos con el avance del largometraje, pero que sin embargo, ni el amor ni el dinero o los planes de ambos podrían adivinar lo que podría suceder.
La muerte llega a la vida de Marina, dejando un vacío físico y sentimental evidente en toda la película. La pena y las ansias de verlo se manifiestan en todas las escenas, y es que de alguna forma, Orlando la protegía o la hacían desviarse de todos aquellos males sociales que podían golpearla a diario.
Sin embargo, y a partir desde ese instante, Marina comienza a toparse con aquella realidad diaria en su entorno. Con aquellos comentarios cortos y desagradables que la cuestionan. Con aquellas preguntas que la colocan en tela de juicio en cada atención, en cada tramite, y ¿Por qué?
Simple, Marina es transexual, y solo por esa razón, será blanco de reproches, de violencia y prejuicios.
Es interesante llegar hasta esta parte y volver a pensar en aquellos comentarios burdos que vi expresados por allí. En la intención de algunos por ver sufrir exageradamente a nuestro personaje en pantalla. Y es cierto, los momentos que pasa Marina son difíciles, son fuertes y podrían destruirla en cualquier momento, porque esas son las intenciones de quienes lo profesan.
Aun así, la mujer que vemos en pantalla es fuerte, decidida y estaba enamorada de aquel hombre que perdió para siempre. ¿Y acaso eso no es bueno?
¿Debemos ver necesariamente el sufrimiento directo de Marina? Porque ella sufre ¿Pero acaso no es suficiente?
Yo creo que es más que suficiente, y lo más importante, levanta una bandera de fuerza y valor, para enfrentarse a aquello que violenta, que envenena y no deja vivir. Porque es cierto lo que se propone en la película de Lelio, la sociedad chilena llega a ser injusta, conservadora, prejuiciosa y hasta violenta.
Sentimientos en pantalla.
Por otro lado, la película de nuestra tierra natal me parece hermosa visualmente.
Por un lado tenemos los colores y las luces, que nos dan la suavidad y el atractivo visual desde la primera escena. La iluminación, por otra parte, nos da intimidad, algo que suele utilizarse en las escenas entre Orlando y Marina y que queda excelente.
Las escenas en los bares y discos les dan frescura y descansos a la temática, que no deja de ser, intencionalmente, bien logradas y hasta románticas.
Sin embargo, hay otra serie de escenas totalmente textuales con lo que Lelio intenta decir. Lo es por ejemplo las, más de tres, escenas con espejos que nos narran la intención de nuestra personaje principal de descubrir su identidad.
Aun así, este tipo de reflexión se contradice un poco con la importancia de Marina en cuanto a su humanidad, más que su sexualidad, y cuya contradicción queda explícita en la escena en que esconde con un espejo sus genitales.
Otra escena, la más difundida, es la parte en que Marina debe caminar contra el viento que se presenta ante ella. Con cada paso se le presenta la dificultad de seguir avanzando, una clara propuesta sobre lo difícil que es para ella seguir.
El viento, representa la manera salvaje con que la tratan algunos e incluso la misma familia de Orlando, mientras que ella es el tema central, el seguir adelante con su vida.
Otro lado de la historia, es comprendida con las canciones que se le instalan en escena. La música, lleva a distintas emociones bajo el contexto de nuestros personajes, y su letra, se une al discurso narrativo que nos entregan, un elemento propio que Lelio ya ha utilizado sutilmente en películas como “Gloria” de 2013.
En resumen, “Una Mujer Fantástica” goza de personajes secundarios reales en nuestro entorno y que además son interpretados por actores chilenos con experiencia como lo son Francisco Reyes, Luis Gnecco, Amparo Noguera, Aline Küppenheim, Antonia Zegers, Néstor Cantillana, Marcial Tagle, entre otros que también son dignos de mencionar. Además de tener a una gran interprete como Daniela Vega, quien no solo se luce en actuación, sino que también en el canto lírico.
Es una película, que aunque quizás, me esperaba un poquito de más desarrollo emocional en pantalla y un poco mas de desarrollo en el mensaje central, deja claro una bandera de lucha actual en nuestro país y no solo sobre identidad de género y diversidades sexuales, sino también sobre tolerancia y sobre amor.
Por último, quiero dejar algo en claro. “Una Mujer Fantástica” ya está haciendo historia en nuestro país, y aunque, por razones que solo la academia norteamericana conoce, no llegase a ganar el Oscar este domingo, la película de Lelio ya ha marcado un precedente.
Recuerda que puedes a volver a saber sobre esta historia este domingo 4 de marzo, y en donde además, la mujer que se interna en la piel de Marina Vidal, será una de las presentadoras en los Premios Oscar en Hollywood.
TRAILER