1 de septiembre 2019 – Blondie
Nota: Freddy Veliz – Fotos: Andie Borie
Los australianos Caligula’s Horse, se formaron hace casi una década, y han ido ganando terreno en la escena del metal progresivo internacional con sendos cuatro álbumes de estudio. Discos que nos presentan una evolución constante, y que los posicionan como uno de los nombres a los que debemos poner atención en la escena progresiva actual. Este 1º de septiembre, llegaron por primera vez a Chile, y era necesario estar presentes para corroborar in situ, los elogios que se han ido ganando en distintos escenarios del mundo.
Club Blondie fue el recinto escogido para recibirlos, y como apertura, el guitarrista chileno Claudio Cordero y su proyecto Plasma, fue el seleccionado para calentar motores a partir de las 19:00 horas, frente a una baja convocatoria, pero que se entregó por completo a la propuesta del eximio músico nacional, quien mostró lo mejor de su catálogo, en una sólida presentación, no dando respiro, y aprovechando lo acotado del tiempo, cautivó a los presentes con cortes instrumentales como “7Days”, “Zenith”, o la portentosa “Megalodón”. Un show que contó con un buen sonido y logradas ejecuciones de cada uno de los miembros componentes de Plasma, quienes han ido calzando las piezas de gran forma, demostrando en cada una de sus presentaciones un trabajo conjunto muy bien articulado.
Siendo las 20:00 horas, se termina la espera, y por primera vez Caligula’s Horse se enfrenta al público chileno. Con un aforo que logró con cierta dificultad llenar en un 50% el recinto, los oriundos de Brisbane, son recibidos con entusiasmo, y arremeten con “Dream the Dead”, corte de ‘In Contact’, su más reciente placa de estudio. De inmediato comenzamos a introducirnos en una propuesta que en vivo se enriquece de potencia y envolventes atmósferas. Jim Grey logra conectar con el público de forma instantánea, y la reacción de los fanáticos, seguramente lo tomó por sorpresa. La banda completa miraba absorta al captar como los chilenos vitoreaban cada uno de las piezas que nos expusieron en cerca de una hora y treinta minutos de show.
Jim se presenta en un casi perfecto español, pero luego acota que no habla el idioma, y que solo era una ilusión, confesando haber practicado la pequeña intro, causando las risas y aplausos del público, distendiendo así la relación en un feedback que se mantuvo durante toda la velada. Si bien la música de Caligula’s Horse no se caracteriza por ser algo muy novedoso, emparentándose fuertemente con la oleada de bandas del género que han aparecido en la última década, sí logran impactar por construir canciones llenas de movimientos que ondulan entre riffs pesados que llaman a sacudir las cabezas, a momentos de introspección, y atmósferas generadas especialmente por sus guitarristas, que nos ofrecen pasajes que invitan a volar por distintos estados.
La agrupación cruzó el Pacífico para ofrecernos un recorrido por sus tres últimos discos, intercalando cortes como “Dark Hair Down” e “Into the White” (incluida sorpresivamente en el set), pertenecientes al álbum ‘The Tide, the Thief & River’s End’ del 2013, con piezas como “Firelight” o “Song for no One” de discos como ‘In Contact’ (2017) y el elogiado Bloom (2015) respectivamente. Música que se extiende en largos pasajes, donde elementos estilísticos que dembulan entre el rock alternativo, lo progresivo e incluso ciertos guiños al jazz fusión, surge para empaparnos de una propuesta fresca y moderna, consistente y muy bien elaborada. Hay tácitas influencias en leyendas como Yes o Rush, pero también de glorias más actuales como Dream Theater, Opeth o Leprous, de estos últimos sentí un fuerte parentesco en las tonalidades vocales de Grey. Un concierto de gran intensidad, que no bajó la temperatura de la caldera subterránea de Blondie en ningún momento.
Caligula’s Horse, se suman a los nuevos baluartes del progresivo actual, con un público que paulatinamente va introduciéndose en su música, generando expectativas y demostrando que en vivo, son una banda imperdible, donde se explayan y conectan con naturalidad, suscitando una complicidad con su público, de quienes se despiden con magistrales interpretaciones de “Bloom” y “Marigold”, sellando la noche dominical con los integrantes sacando celulares y registrando este momento, que sin dudas es de gran importancia para ellos, abriéndose camino en este rincón del planeta, donde fueron recibidos con la calidez que caracteriza al público chileno. Caligula’s Horse, es un banda que todavía se encuentra en el límite del under, aun no se masifica como otras del género, pero esto sirvió como el primer paso para la conquista de Sudamérica. Grey prometió regresar con su próximo álbum, por lo menos el entusiasmo se reflejó en sus rostros, muy conformes con este debut cabalgando a tantos miles de kilómetros de sus tierras.
Set list:
Dream the Dead
Rust
Dark Hair Down
Into the White
Firelight
Turntail
Songs for No One
Daughter of the Mountain
Graves
Encore:
Bloom
Marigold
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